Los perros y el embarazo

La importancia de la convivencia entre mujeres embarazadas y sus perros: ventajas, precauciones y cuidados

2/11/2024

La relación entre una mujer embarazada y su perro va más allá de una simple convivencia; se trata de un vínculo que puede tener un impacto profundo en la salud y el bienestar tanto de la madre como del bebé en desarrollo. Desde el equilibrio hormonal hasta el fortalecimiento del sistema inmunológico, compartir el hogar con un perro durante el embarazo presenta una serie de beneficios y desafíos que merecen ser explorados con detenimiento.

Beneficios de la convivencia con perros durante el embarazo:

  • Equilibrio hormonal y bienestar emocional: Durante el embarazo, el cuerpo experimenta cambios hormonales significativos, incluido un aumento en la producción de oxitocina, conocida como la "hormona del amor". La interacción con un perro puede estimular la liberación de esta hormona, promoviendo sentimientos de calma, bienestar y conexión emocional entre la mujer embarazada y su fiel compañero.

  • Reducción del estrés y la ansiedad: La presencia de mascotas, incluidos los perros, ha demostrado reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés, en el cuerpo humano. Este efecto es especialmente beneficioso durante el embarazo, cuando el estrés crónico puede tener efectos adversos en la salud de la madre y el desarrollo del bebé. El apoyo emocional brindado por un perro puede ayudar a la mamá a enfrentar los desafíos emocionales asociados con la gestación de manera más efectiva.

  • Estímulo del ejercicio y la actividad física: Cuidar a un perro en esta etapa puede motivar a la mujer a mantenerse físicamente activa. Los paseos regulares con el perro no solo promueven el ejercicio cardiovascular, sino que también contribuyen a una mejor salud musculoesquelética y pueden ayudar a prevenir complicaciones gestacionales como la diabetes gestacional y la hipertensión.

  • Fortalecimiento del sistema inmunológico: La exposición a bacterias y microorganismos presentes en el entorno del perro puede estimular el sistema inmunológico tanto de la madre como del bebé en desarrollo. Este estímulo puede ayudar a fortalecer las defensas naturales del cuerpo y reducir el riesgo de alergias y enfermedades infecciosas tanto durante el embarazo como en el futuro del bebé.

Desafíos y precauciones a tener en cuenta:

  • Riesgo de infecciones y enfermedades zoonóticas: Aunque la convivencia con perros puede fortalecer el sistema inmunológico, existe un riesgo potencial de transmisión de enfermedades zoonóticas como la toxoplasmosis. Es esencial que la mujer embarazada tome precauciones adicionales, como evitar el contacto con las heces del perro y mantener una higiene adecuada para prevenir cualquier riesgo de infección.

  • Cambios en el comportamiento del perro: Algunos perros pueden experimentar cambios en su comportamiento en respuesta a los cambios hormonales y emocionales de su dueña durante el embarazo. Es importante monitorear de cerca el comportamiento del perro y tomar medidas adecuadas para garantizar la seguridad de todos los involucrados.

  • Posibles lesiones y accidentes: Durante el embarazo, la mujer puede ser más propensa a lesiones, especialmente relacionadas con caídas. Es fundamental practicar una manipulación segura del perro y evitar situaciones que puedan aumentar el riesgo de lesiones, como juegos bruscos o paseos sin control.

  • Cuidados adicionales necesarios: El cuidado de un perro durante el embarazo puede requerir esfuerzos adicionales, especialmente si la mujer embarazada experimenta fatiga o problemas de movilidad. Asegurar que el perro reciba atención veterinaria regular y mantener una higiene adecuada en el hogar son pasos importantes para proteger la salud de todos los involucrados.

¿Tenes uno o más perros? Bien por vos :)